Alan Rickman, el actor británico que dio vida (entre muchos otros personajes) al oscuro profesor Severus Snape en las películas de la saga Harry Potter, ha fallecido en Londres. Tenía 69 años. La noticia fue confirmada por su familia este jueves. Rickman padecía cáncer. Rickman participó en películas como Sentido y Sensibilidad, Love Actually, El mayordomo, Alicia en el País de Maravillas, Sweeney Todd o Robin Hood, príncipe de los ladrones. Además, fue uno de los rostros más conocidos de la escena británica. El actor nunca recibió un Oscar, pero sí un Globo de Oro, un Emmy y un Bafta. "Los actores son agentes del cambio", explicó una vez, en una frase recogida por The Guardian en su completísimo obituario. "Una película, una obra de teatro, una canción o un libro pueden marcar la diferencia. Pueden cambiar el mundo".
La cinematografía que ha transformado la sociedad, y que ha descubierto su propio lenguaje, en un mundo donde la humanidad, frecuentemente esta en la búsqueda de descubrir nuevos horizontes. El cine nos permite disfrutar de la imaginación de hombres y mujeres que saben contar una historia basada en la realidad o ficción donde la imagen en movimiento habla por si sola. El ingenio de unos se transformo en el disfrute de otros que perdura hasta hoy.