"Incluso mi hijo de cuatro años se emociona por practicar tiro con su (pistola de calibre) .22", presumió el lunes en las redes sociales Jamie Gilt, una activista que defiende el derecho al porte de armas en Estados Unidos.
Menos de 24 horas después, la mujer era herida accidentalmente por su hijo de 4 años, quien le disparó accidentalmente por la espalda con un arma semiautomática calibre .45 que ella había dejado cargada en la parte trasera de su camioneta.
El accidente ocurrió mientras Gilt iba con el niño camino a recoger un caballo en el condado de Putnam, en el estado de Florida.
Aparentemente, el pequeño logró tomar el arma mientras iba sentado en el asiento de atrás y realizó un disparo que atravesó el asiento de su madre y la hirió por la espalda.
Según dijo la policía al diario Florida Times Union , un funcionario policial vio a la mujer con signos de desesperación dentro del vehículo cuando notó que estaba herida.
La mujer le dijo al policía que su hijo le había disparado accidentalmente.El pequeño se encontraba bien y el arma estaba en el piso de la parte trasera de la camioneta.
El vehículo no mostraba signos de haber recibido un disparo desde el exterior, por lo que la policía cree que el tiro fue hecho desde dentro.
"Armas con buen juicio"
Gilt, de 31 años, es la responsable de una página en Facebook que promueve el derecho que tienen los ciudadanos en Estados Unidos a portar armas de fuego , recogidos en la Segunda Enmienda de la Constitución de ese país.
Gilt defiende el derecho que tienen los ciudadanos en Estados Unidos a portar armas de fuego.
El grupo se llama Jamie Gilt for Gun Sense (algo así como Jamie Gilt a favor del uso racional de las armas de fuego) y contaba con casi 1.000 "Me gusta" esta semana.
En la página Gilt colgó numerosos mensajes a favor de las armas.
En sus perfiles de las redes sociales aparecen numerosas fotos de ella portando armas y en una de ellas se la ve sosteniendo un rifle a un lado y al otro a su hijo.
Gilt, quien este miércoles se encontraba en condición estable, no había podido ser interrogada por la policía en el hospital.
Sin embargo, los detectives que investigan el casoadvirtieron que la mujer podría enfrentar cargos después de que se determine cómo el niño logró tomar el arma.
"Las leyes de Florida consideran como una falta el que una persona guarde o abandone, en un lugar bajo su control, un arma de fuego cargada de tal manera que sea posible para un niño acceder a esta", dijo la policía en una declaración.
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