El joven que apareció inconsciente en la vía Nobol-Daule orina por una sonda
el afectado esta en tratamiento sicologico y nesesita de urgencia ayuda medica
La madrugada del 14 de abril de 2015, un joven fue encontrado cerca del redondel del recinto Pajonal, en la vía Nobol-Daule, sin sus genitales.Aquella noche, dos agentes del comando de Daule lo trasladaron al hospital Vicente Pino Morán, de Daule, y luego al hospital Guayaquil, donde continúa con su tratamiento.Luego de un año de haberse quedado sin su órgano sexual nos reveló lo duro que ha sido vivir así. Sentado en una pequeña hamaca, el joven, de 27 años, expresó que necesita un trabajo para distraerse. “Estoy tratando poco a poco de integrarme a mi vida normal, saliendo de la casa a ver jugar fútbol, ya que cada mes que asisto al psicólogo y al endocrinólogo me dicen que con las distracciones sigo evolucionando”, precisó.Además, espera que alguien lo ayude para colocarse un implante.
POR UNA SONDAEl joven orina por una pequeña sonda que se limpia cada cinco días y asiste una vez al mes a las consultas médicas en los hospitales Guayaquil y Universitario, en la urbe porteña, donde continúan valorándolo.
ASISTE AL TEMPLONo guarda ningún rencor. “Lo poco que me acuerdo de aquel día se lo comenté a la policía y a la fiscalía, no estoy ocultando nada, solo estoy pensando en mi recuperación”, dijo el muchacho.Dice que su situación no lo acompleja para nada, ya que “desde el primer momento la Santa Biblia ha estado a mi lado... Ahora asisto a un templo evangélico, donde cada día tengo una relación cercana con el ser Supremo”.
CONFÍA EN LA JUSTICIA“Confío plenamente en la justicia y sé que se identificará a quienes hicieron esta maldad, que no se la deseo ni a mi peor enemigo. Agradezco a toda la comunidad que nos ha ayudado, especialmente a los lectores de EXTRA”, dijo el joven. El padre del chico dijo: “los médicos nos han dicho que se le puede hacer un implante de genitales, pero esto cuesta mucho dinero. Lo poco que gano vendiendo pescado en el mercado solo me alcanza para comprarle sus alimentos y medicinas”.El fiscal de Daule, Darwin Muñoz, expresó que hasta el momento solo se han receptado las versiones de la víctima, de sus padres y amigos.El progenitor del afectado señaló que han colaborado con el proceso investigativo rindiendo versiones para tratar de encontrar a quienes atentaron contra la vida de su vástago.
TIENE UN BONOSu madre, de 75 años, expresó que gracias a Diario EXTRA -que no se ha olvidado del caso de su hijo- hace dos meses comenzó a cobrar el bono de Desarrollo Humano. Con ese dinero compra sus medicinas. Hace pocos días, el joven cumplió años y solo pidió a sus amistades que le ayuden a conseguir un empleo para “terminar definitivamente con esta pesadilla”. Al chico le preocupa que sus padres no tengan recursos para comprar inyecciones, pastillas para controlar sus emociones, ya que hasta la alimentación es rigurosa. “No puedo ingerir toda clase de comida, como carnes rojas y embutidos, solo legumbres”, manifestó.Él necesita suplementos vitamínicos, como Nutricalcin, Ensure y pastillas como spiron, quetiapina, fluoxetina de 20 miligramos, sertex y valcote divalproato de sodio.La ayuda en el hospital Guayaquil ha sido completa, especialmente en el área psicológica. Por eso promete que seguirá adelante, “ya que tengo las mismas posibilidades que las personas normales... el hecho de que no tenga mis partes íntimas no me hace ni más ni menos, no le doy importancia a los comentarios malintencionados y sigo adelante”.Ese fatídico día, el joven salía de trabajar en un bar, ubicado en el centro de Nobol, donde se desempeñaba como mesero. Al parecer, antes de llegar al sector del Cerro Pelado, en el recinto San José, fue interceptado por un sujeto que le desgració la vida.
POR UNA SONDAEl joven orina por una pequeña sonda que se limpia cada cinco días y asiste una vez al mes a las consultas médicas en los hospitales Guayaquil y Universitario, en la urbe porteña, donde continúan valorándolo.
ASISTE AL TEMPLONo guarda ningún rencor. “Lo poco que me acuerdo de aquel día se lo comenté a la policía y a la fiscalía, no estoy ocultando nada, solo estoy pensando en mi recuperación”, dijo el muchacho.Dice que su situación no lo acompleja para nada, ya que “desde el primer momento la Santa Biblia ha estado a mi lado... Ahora asisto a un templo evangélico, donde cada día tengo una relación cercana con el ser Supremo”.
CONFÍA EN LA JUSTICIA“Confío plenamente en la justicia y sé que se identificará a quienes hicieron esta maldad, que no se la deseo ni a mi peor enemigo. Agradezco a toda la comunidad que nos ha ayudado, especialmente a los lectores de EXTRA”, dijo el joven. El padre del chico dijo: “los médicos nos han dicho que se le puede hacer un implante de genitales, pero esto cuesta mucho dinero. Lo poco que gano vendiendo pescado en el mercado solo me alcanza para comprarle sus alimentos y medicinas”.El fiscal de Daule, Darwin Muñoz, expresó que hasta el momento solo se han receptado las versiones de la víctima, de sus padres y amigos.El progenitor del afectado señaló que han colaborado con el proceso investigativo rindiendo versiones para tratar de encontrar a quienes atentaron contra la vida de su vástago.
TIENE UN BONOSu madre, de 75 años, expresó que gracias a Diario EXTRA -que no se ha olvidado del caso de su hijo- hace dos meses comenzó a cobrar el bono de Desarrollo Humano. Con ese dinero compra sus medicinas. Hace pocos días, el joven cumplió años y solo pidió a sus amistades que le ayuden a conseguir un empleo para “terminar definitivamente con esta pesadilla”. Al chico le preocupa que sus padres no tengan recursos para comprar inyecciones, pastillas para controlar sus emociones, ya que hasta la alimentación es rigurosa. “No puedo ingerir toda clase de comida, como carnes rojas y embutidos, solo legumbres”, manifestó.Él necesita suplementos vitamínicos, como Nutricalcin, Ensure y pastillas como spiron, quetiapina, fluoxetina de 20 miligramos, sertex y valcote divalproato de sodio.La ayuda en el hospital Guayaquil ha sido completa, especialmente en el área psicológica. Por eso promete que seguirá adelante, “ya que tengo las mismas posibilidades que las personas normales... el hecho de que no tenga mis partes íntimas no me hace ni más ni menos, no le doy importancia a los comentarios malintencionados y sigo adelante”.Ese fatídico día, el joven salía de trabajar en un bar, ubicado en el centro de Nobol, donde se desempeñaba como mesero. Al parecer, antes de llegar al sector del Cerro Pelado, en el recinto San José, fue interceptado por un sujeto que le desgració la vida.
FUENTE:DIARIO EXTRA
Comentarios